Una de las experiencias más extraordinarias y peculiares que pueden disfrutarse en un viaje a Narbona es la Reserva africana de Sigean. Se trata del mejor plan para disfrutar en familia, un lugar que encantará tanto a niños como a adultos. ¿Quién te iba a decir que divisar animales salvajes y admirar la naturaleza en estado puro era posible en plena región de Occitania? Llegar a Narbona es más fácil que nunca desde España con los trenes de alta velocidad de Renfe-SNCF en Cooperación, pero también lo es visitar este pequeño trocito de África en Francia, que apenas dista 15 km de la ciudad occitana.
Es un lugar perfecto para que los más pequeños puedan ver los animales en estado semi natural
La Reserva africana de Sigean acoge a más de 3.800 animales en unas 300 hectáreas. Este lugar se localiza en un entorno clave para numerosas aves migratorias, dada su proximidad al litoral mediterráneo. Flamencos, cigüeñas negras, martín pescadores, azulones, garzas reales, cormoranes o patos colorados son algunas de las aves que pueden divisarse en este parque como parada obligatoria en sus largas travesías. Muchas de ellas, sin embargo, son sedentarias y, de hecho, nidifican en la reserva, por lo que la familia nunca para de crecer.

Pero sin lugar a dudas lo que más llama la atención de los visitantes son los mamíferos como los antílopes, las cebras, los dromedarios, las jirafas, los guepardos, los leones, las suricatas o los osos. Como si de la sabana africana se tratase, estos animales campan a sus anchas en condiciones de semi-libertad por la reserva, lo que significa que los visitantes tendrán la oportunidad de contemplarlos muy cerca. Sin duda, una experiencia increíble que requiere tener preparada la cámara en busca de la mejor captura.
La visita a la Reserva africana de Sigean
En la reserva se pueden contemplar animales de todos los tamaños y clases
Las visitas a la Reserva africana de Sigean contemplan un recorrido de un total de 7,5 km. La primera hora se realiza en el propio vehículo. En este trayecto no será difícil cruzarse con avestruces, jirafas o cebras, aunque habrá que abrir bien los ojos para identificar a los rinocerontes blancos o a los asnos de Somalia, entre muchos otros animales.
La visita continuará a pie alrededor de 2 horas y 30 min. En este caso, será por los estanques de la reserva, donde habitan cigüeñas blancas, flamencos y pelícanos. El vivarium es otro de los ejes centrales del recorrido a pie. Aquí será posible ver boas, aligátores o iguanas. No podemos olvidarnos de los puntos de observación de la reserva, desde donde contemplar chimpancés, guepardos o antílopes africanos.
El circuito tiene una duración total de entre 3 y 4 horas, si bien los visitantes tienen la opción de pasar todo el día si lo desean en sus instalaciones. Hay diferentes snacks-bar y una zona de picnic para hacer un alto en el camino antes de seguir disfrutando de la vida salvaje.
La Reserva africana de Sigean está abierta los 365 días del año en un amplio horario, en función de la temporada. Sube a nuestros trenes de Renfe-SNCF en Cooperación, que te llevamos a toda velocidad hasta Narbona.
